Todo apunta a que 2015 será una año de mayor actividad en la compraventa de viviendas. Con los precios estables, más oferta disponible y crédito asequible y barato en circulación, muchos darán el paso de adquirir una casa, una tarea ni mucho menos sencilla. Por eso, en CasaToc repasamos algunas pautas a seguir antes de comprar una vivienda.

1. Situación personal

El primer paso del potencial comprador debe ser analizar su situación personal, económica y laboral, siendo realista y con previsiones a largo plazo. Esta reflexión muy pocas veces se hace, los compradores suelen mirar a corto plazo, ver si pueden pagar la entra y la cuota de la casa de sus sueños…Lo ideal es ser consciente de estas variables y tomar la decisión conociéndolas. Este punto de partida puede dar al traste con la intención de comprar si no se cumplen ciertos criterios, principalmente financieros y de empleo. Dependiendo de estas circunstancias, se constatará si la compra es factible o no.

2. Fijar un presupuesto

Antes de comenzar a buscar, el comprador tiene que definir el presupuesto con el que cuenta. De nuevo, la clave pasa por ser realista y marcar una cantidad acorde a su perfil. ¿Cómo se calcula este importe? Hay varias fórmulas, aunque quizás lo más apropiado sea estudiar el esfuerzo económico. Los economistas defienden que la cuota hipotecaria a pagar no debe sobrepasar un tercio de los ingresos familiares o que el precio de la casa no suponga entre cuatro y cinco años de salario bruto anual. Una vez fijado el presupuesto, esta cuantía no debe variar al alza más de un 5% porque el comprador estaría accediendo a una vivienda que está por encima de sus posibilidades. Además hay que tener en cuenta los impuestos como el IPT o el IVA y los gastos de notario y registro, que pueden incrementar el precio marcado entre un 13 y un 15%.

3. Visita al banco

Aunque cada uno puede estimar cuál es su presupuesto aproximadamente con los métodos mencionados, lo más aconsejable es ir al banco para confirmar con qué se puede contar. El mejor consejo es que el potencial comprador visite la entidad financiera antes de iniciar la búsqueda para sable la financiación a al que puede aspirar si necesitara hipoteca.

4. Delimitar la zona

Hay que plantearse dónde se quiere vivir y después tantear los precios en esa zona. Si los costes de la oferta  en el enclave elegido no encajan, hay que ir alejándose circularmente respecto al punto establecido.

5. Elegir tipología

Según sus necesidades, el comprador debe fijar que tipo de casa requiere o requerirá a corto y medio plazo (los más conservadores deben mirar a largo plazo, a una casa para toda la vida). Debe perfilar, por este orden, la superficie, el número de dormitorios, el número de baños, si precisa garaje o trastero, que la finca tenga o no ascensor, si se quiere terraza o que esté ubicada en una urbanización con zonas comunitarias, etc. Por sentido común, la tipología es fundamental al elegir una casa, pero la variable del precio resulta un condicionante insalvable. Lo lógico es ir restando criterios a la vivienda deseada para no pasarse del presupuesto. Entre los extras a renunciar en primer lugar estarían algunos metros cuadrados de superficie , la terraza y áreas comunitarias como la piscina o el gimnasio. Hay que tener claro cuales son las prioridades y los aspectos en los que se puede ser más flexibles.

6. Buscar en…

Los portales inmobiliarios de internet, como CasaToc, representan grandes escaparates de viviendas del momento. Las nuevas tecnologías han traído consigo herramientas que permiten hacer una búsqueda de la casa a medida en pocos minutos con acceso a multitud de datos y fotos. Además, aglutinan prácticamente toda la oferta: desde las casas de particulares hasta el producto de los bancos, pasando por los pisos de los promotores y de agencias inmobiliarias.

7. Selección de inmuebles

Para acelerar el proceso, el demandante tiene que hacer una exhausta selección de casas a visitar, intentando que éstas respondan en el mayor algo grado posible a lo que busca. Una vez realizada la clasificación pormenorizada de los inmuebles visitados y tras haber acotado la búsqueda a tres como máximo, lo idóneo sería asegurarse de que registralmente esas viviendas no esconden sorpresas (deudas hipotecarias, un uso diferente, el nombre del propietario, etc.). Estas verificaciones pueden hacerse a través del Registro de la Propiedad y en la Dirección General del Catastro.

8. Precio

Cuando ya se han visto todas las viviendas preseleccionadas, lo ideal es hacer un ránking de preferencias. Todas tendrán pros y contras.Resulta clave hacer un minucioso estudio de precio de la zona para comprobar que las pretensiones económicas del vendedor son adecuadas y en caso de no ser lo poder refutarle a la hora de negociar. Para asegurarte de que pagarás lo justo, más que mirar los precios de oferta en la zona, lo mejor es consultar estudios oficiales. Por ejemplo, los notarios publican mensualmente el valor medio de las casas vendidas en cada ciudad e incluso llegan a detallar los precios por distritos.

9. Negociar

Por ahora, aún puede negociarse a la baja. Un regateo al que no le quedaría mucho recorrido toda vez que la estabilización de los precios parece cantada con expectativas incluso que apuntan al alza. Actualmente, un buen descuento está entre un 10 y un 15%.

10. La compra

Tras al alcanzar el acuerdo con el vendedor, llega la situación más farragosa: el papeleo. Gestiones en las que se hace obligatoria la ayuda de profesionales. Sobre todo si se contrata una hipoteca. Antes de firmar, el comprador debe estudiar muy bien todos los documentos. Entre estos, la escritura hipotecaria, cuya oferta vinculante debe tener por ley desde días antes. El notario es elegido por el comprador que es quien ha de pagarlo.

Hasta llegar a la firma de la compra pueden haber pasado varios meses. Lo aconsejable es encontrar la casa soñada en dos o tres meses. Ya sabes, encuentra la tuya en CasaToc, tu portal inmobiliario.